El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha publicado un nuevo documento que tiene como objetivo proveer información, recomendaciones de políticas y enseñanzas con base en las experiencias de la región y a nivel internacional en lo que refiere al diseño y la implementación de estrategias financieras de cambio climático, y cómo pueden mejorar su efectividad de cara al futuro. Las estrategias financieras climáticas son instrumentos utilizados por los países para dimensionar las necesidades fiscales y orientar las finanzas públicas y privadas para lograr las metas de mitigación y enfrentar los retos de la adaptación.
Entre las principales conclusiones, los autores destacan la necesidad de elaborar diagnósticos basados en datos, incluir medidas generales y específicas con objetivos realistas, y evaluar las capacidades institucionales para la implementación, así como llevar a cabo consultas con actores relevantes, incluyendo al sector financiero, en el desarrollo de las estrategias de financiamiento. Además, resaltan como esencial asegurar la coherencia y la calidad de las medidas y priorizar los instrumentos estratégicos, e introducir un mecanismo de rendición de cuentas y el constante monitoreo del resultado y del desempeño en el proceso de implementación de las estrategias.
El análisis se enmarca en el Plan de Trabajo de la Plataforma Regional de Cambio Climático de Ministerios de Hacienda, Economía y Finanzas, un espacio de intercambio de conocimientos en la formulación de políticas fiscales para enfrentar las consecuencias del cambio climático.