El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha publicado un estudio en el que presenta una serie de prácticas y herramientas de gestión útiles para integrar la acción climática en la gestión de inversión pública y prestan especial atención a aquellas que apoyan las etapas de planificación y asignación de recursos.

El documento analiza y propone un marco de intervención en los procesos de gestión de la inversión pública que incluye: i) adoptar estrategias nacionales de adaptación y descarbonización como herramientas para orientar las inversiones; ii) establecer estrategias de financiamiento climático que faciliten el acceso a los recursos necesarios para poner en marcha los proyectos prioritarios; iii) integrar la gestión de riesgos frente a eventos climáticos en la gestión de la inversión pública; iv) utilizar el precio social del carbono en las evaluaciones de costo beneficio de los proyectos; v) aplicar taxonomías de inversiones verdes; y vi) adoptar procesos de priorización de las inversiones resilientes y bajas en carbono

Por último, los autores exponen una serie de consideraciones sobre gobernabilidad y generación de capacidades institucionales que debieran considerarse para acelerar el alineamiento de la gestión de la inversión pública con las metas climática nacionales y globales.