La Iniciativa de Bonos Climáticos (CBI) ha publicado una actualización de su metodología de base de datos de bonos verdes (GBDB).

La Metodología GBDB se utiliza para medir si las colocaciones de deuda etiquetada se encuentran alineadas con los objetivos climáticos internacionales, regulando el uso de los fondos (UoP por sus siglas en inglés) obtenidos en el mercado de deuda verde, reforzando la confianza de los inversores y dando forma a políticas orientadas a fomentar la inversión climática. Se basa en cuatro principios fundamentales que guían su marco de evaluación: i) credenciales verdes basadas en la mitigación y el impacto ambiental; ii) hallazgos basados en datos e investigación científica; iii) flexibilidad y practicidad; iv) umbrales de salvaguardas climáticas y ambientales.

La actualización de 2024 tiene como objetivo mejorar la usabilidad en el mercado, siendo sus mejoras clave las siguientes: i) credenciales verdes inclusivas y ampliadas que ahora incluyen actividades vitales para la transición hacia una economía baja en carbono posterior a 2050; ii) expansión sectorial ahora cubriendo la economía azul y los recursos marinos; iii) flexibilidad en el uso de los recursos, introduciendo un margen del 10% para sectores que carecen de métricas fácilmente disponibles o que requieren una evaluación adicional con respecto su benchmark.