BID Invest, en colaboración con la firma de asesoría en inversiones de impacto ambiental y de administración de fondos Finance Earth, ha publicado un informe que presenta las tendencias y oportunidades de inversión para la conservación marina en América Latina y el Caribe (LAC).

Los esfuerzos de conservación destinados a preservar y restaurar los ecosistemas marinos son componentes esenciales para combatir el cambio climático y restaurar la biodiversidad, y de importancia crítica para la región de LAC; donde más del 25% de la población vive en áreas costeras, con poblaciones que dependen en gran medida de industrias clave como la pesca, la acuicultura, el transporte marítimo y el turismo para su sustento. Se estima que la economía azul aportó más de 407 mil millones de dólares al PIB de la región, y genera millones de empleos.

El informe proporciona un marco para evaluar el éxito de modelos de negocios para la conservación marina, considerando factores como la sostenibilidad, la rentabilidad, la gobernanza y el impacto social. Se analizan varios casos de negocios que cubren tres amplias categorías: Pagos por Servicios Ecosistémicos (PSA por sus siglas en inglés); Modelo premium de la cadena de suministro; y Empresas Sostenibles.

Finalmente, los autores identificaron barreras clave y desarrollaron recomendaciones sobre cómo las empresas y las partes interesadas (incluido el sector público y las organizaciones sin fines de lucro), pueden abordarlas mientras apoyan objetivos económicos y de sostenibilidad más amplios. Los principales hallazgos del estudio se resumen en:

• Apoyar la conservación marina tiene sentido de negocio
• La restauración o conservación alineada con el objetivo core de negocio es más probable que logre éxito a largo plazo
• Un modelo de ingresos mixtos puede ser beneficioso
• La financiación mixta (“blended finance”) juega un rol relevante
• Los mercados de capital natural “azul” pueden apoyar la conservación marina, y más aún, existe un beneficio en el desarrollo de proyectos de carbono azul de alta calidad
• El beneficio y la inclusión de las comunidades son clave
• Las políticas claras y los marcos de inversión son esenciales para acelerar la participación del sector privado
• Transparencia, mensurabilidad y verificabilidad