La taxonomía de la Unión Europea se enmarca en el plan de acción de la Comisión Europea para financiar el crecimiento sostenible, y tiene por objeto impulsar la inversión verde y evitar el greenwashing.
A principios de julio 2022, el Parlamento Europeo ha desestimado una moción contra la inclusión de la energía nuclear y el gas como actividades económicas ambientalmente sostenibles. La Comisión considera que la inversión privada en gas y energía nuclear tiene su papel en la transición verde y por ello se ha propuesto que ciertas actividades relacionadas con el gas fósil y la energía nuclear sean consideradas actividades de transición que contribuyen a mitigar el cambio climático. Dicha inclusión será limitada en el tiempo y deberá cumplir requisitos específicos en condiciones de transparencia. La taxonomía entrará en vigencia el 1 de enero de 2023.